lunes, 4 de agosto de 2008

Supe que tienes un grupo musical


El otro día iba caminando al metro luego de un agotador día laboral y en la misma dirección iba una señora muy amorosa que trabaja en la misma casa que yo, pero en el piso de abajo.

En el camino, conversamos de varias cosas, pero lo que más me sorprendió fue que me dijo: “Supe que tienes un grupo musical ¿cómo va eso?” Cuando le contesté que no era así, se quedó estupefacta y me dijo “¿ah, no? Pero si tú tienes una voz tan linda” ¡Plop!

En fin, eso me llevó a preguntarme por qué en mi pega, alguien a quien veo cada 2 meses con suerte, tiene la idea de que tengo una banda ¿Acaso se habrá echado a correr un rumor al respecto? No quise preguntarle de dónde había sacado tal idea para no incomodarla, pero voy a preguntar a otras personas, como que no quiere la cosa…

Bien, si bien es verdad que soy afinadita, mi voz es más común que las papas fritas.

Mi profesora de coro del colegio me hizo una prueba y soy mezzosoprano, por lo que los tonos altísimos no son precisamente mi fuerte.

Por otra parte, aunque puedo hacer falsetes choros como voz más nasal o más ahuecada, según la canción, imagino que hay miles de personas con esa capacidad.

Tampoco me voy a tirar al suelo, canto bien a capella y en mi pega siempre me piden que cante en los eventos, nunca me han abucheado ni he pasado una vergüenza. Es que también me lo tomo con seriedad para no hacer el ridículo y ensayo disciplinadamente y con anticipación. Considero que tengo buen desplazamiento escénico y gracia, no hago interpretaciones planas.

Siempre he cantado en público: en el coro del colegio, en la iglesia (sí, increíblemente sí), en festivales escolares, en eventos familiares y de mi trabajo, por lo que el pánico escénico no es algo que me afecte, de hecho me gusta muchísimo cantar.

Pero, por supuesto, una cosa es realizar una performance dos veces al año y otra muy distinta es llevar a cabo un proyecto musical con todo lo que ello implica.

Nunca me planteé la posibilidad de ganarme la vida con mi voz, ni mucho menos, tampoco soñaba de niña con ser cantante, así que no me siento frustrada en ese sentido. Estoy feliz trabajando como ingeniero y dejaré que quienes realmente tengan un talento especial deleiten al mundo.

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