viernes, 20 de junio de 2008

Negligencia

Una forma de maldad ruin y solapada es, en mi opinión, la negligencia ¿Cómo una persona que tiene facultades de ayudar a otra no lo hace (sin una razón justificada)?

Me ha tocado verlo en 7 años de vida laboral. He escuchado muchas veces la frase "No pienso hacerlo porque no es mi pega" o "No es mi culpa, así que no voy a hacer nada". Esa es una de las causas por las cuales los sistemas de gestión gringos no se pueden implantar en nuestro país, no resulta con esa mentalidad.

Y en otros ámbitos de la vida: "Sí, por supuesto que te ayudo, yo te llamo" y nunca fue. O "No me pienso meter", siendo que esa persona sabe que puede ayudar.

Sé que a veces puedo parecer metiche, pero creo que si uno ve que alguien está en dificultades tiene el deber moral de ayudar, a veces sólo consiste en dar un consejo a un amigo, o darse tiempo para entregar un talento que nadie más tiene en ese momento y en ese lugar.

Por supuesto, yo no soy ni por lejos perfecta. También peco de negligencia, pero con mucha culpa y rabia cuando me doy cuenta de ello.

Todos tenemos algo que entregar: una sonrisa al taxista o al vendedor, una palabra amable a un colega o a la persona que viaja con nosotros en el ascensor. No siempre uno está de ánimo, pero ahí está la gracia: en vencer el malhumor y atinar.

Es increíble la forma en que las caras largas se contagian y cómo un gesto amable puede cambiar el día de alguien.

Yo estoy conciente de que influyo en mi entorno y hago esfuerzos sobrehumanos para que cuando alguien me pregunta "¿cómo estás?", decir: "me siento pésimo ahora, pero no tengo planeado morirme todavía XD" o "filo, me voy a poner mejor porque todavía hay alternativas", mientras mi corazón late desbocadamente en una carrera sin final.

Yo hago traducciones gratis cuando me las piden, si es que tengo tiempo ¿cómo me voy a negar a ayudar? Tengo el talento, tengo la oportunidad y existe la necesidad, es la oportunidad perfecta de actuar.

Ayúdame gratis, sólo porque sí...

1 comentario:

Seba dijo...

Sí, é velda', hay que ayudar cuando se puede, pero también es cierto que hay personas que terminan "aprovechándose de nuestra nobleza", ahí lo complicado es poner los límites. Yo soy malo para poner límites y eso me ha pasado la cuenta varias veces, pero qué le vamos a hacer, esto de ser noble es terrible. Jajjajaa.

Me cuesta mucho decir que no, como dije en un post reciente.

Abrazos.