¡Sorpresa!

Un día que salimos con el gringo, no me fijé en que se afeitó los costados de la barba y quedó con un candado. Craso error, se sintió ignorado a morir.

La cosa es que se me ocurrió prepararle una sorpresa para reivindicarme. Es decir, demostrar que no me di cuenta de su cambio de volada y no por falta de interés en su persona.

Hoy recibí las 2 partes que componen el misterioso presente y espero que le guste, si no todo mi esfuerzo irá a dar al tarro de la basura, pero no importaría, igual lo pasé bien planificando y llevando a cabo todo.

Espero que nos podamos ver este jueves, así podré salir de la duda ¿Qué cara pondrá cuando grite "Sorpresa"???